Desde siempre me gustó esta combinación de olor y sabor, chocolate y menta...dulce y refrescante, pero concretamente este chocolate, "After Eight" hace de una simple galleta o de un helado, algo más...
Soy consciente de que no a todo el mundo le gusta (de hecho, a casi nadie de a mí alrededor) pero también sé de personas que lo adoran, así que he decidido compartirlo con vosotr@s. Si aún estáis indecis@s, os animo a probarlas; es posible que os llevéis una dulce sorpresa :) ¿Qué necesitamos?
(Os recomiendo que tengáis todos los ingredientes y utensilios listos y preparados, así como las cantidades ya medidas, antes de comenzar a cocinar.)
1. Tomamos los 112g de mantequilla (preferiblemente sin sal) pomada (quiere decir suave y blanda: podéis dejarla fuera del refrigerador para que se derrita, un tiempo antes de comenzar a cocinar, o bien derretirla a baja temperatura en el microondas, sin dejar que llegue a hacerse líquida). Juntaremos también unos 60g de azúcar moreno y azúcar blanca (podéis añadir más cantidad de una o de otra; yo siempre hago que prevalezca el azúcar moreno); (60g son suficientes para que queden bastante dulces, pero podéis reducir o aumentar esta cantidad al gusto.)
2. Añadimos ambos ingredientes al robot de cocina o varillas, y batimos bien hasta que quede una mezcla homogénea y suave (en la Thermomix, 3 minutos a velocidad 1 es suficiente).
3. Tendría que verse algo así.
4. Agregamos tanta crema de cacao como queramos (yo añadí 2 cucharadas grandes) las láminas de After Eight (2 láminas) y mezclamos todo bien hasta obtener una crema suave y homogénea (entre 6 y 8 minutos, a velocidad 1 para Thermomix).
5. A esta mezcla homogénea añadimos el huevo, y volvemos a batir para integrarlo bien (a velocidad 1, durante 2 minutos más o menos en Thermomix).
6. Calentamos unos segundos al microondas los 15ml de agua y agregamos los 5g de levadura en polvo, removiendo con una cucharada para disolverlos bien en el agua caliente.
7. Añadimos esto a la mezcla, y volvemos a batirlo todo para que se reparta bien.
8. Agregamos los 200g de harina para repostería a nuestra mezcla, poco a poco, no de golpe, e iremos batiendo todo progresivamente a golpe de varillas eléctricas o Thermomix, hasta que nos quede completamente integrado e uniforme. Mientras la masa de galletas va adquiriendo consistencia, podemos ir precalentado el horno (unos 5 minutos, a 175ºC) y preparando la bandeja con un poco de papel de cera, para que la masa no se quede pegada a ella, y pasamos la masa a un recipiente más cómodo.
9. Vamos haciendo bolitas y colocándolas en la bandeja del horno. Teniendo en cuenta que son galletas caseras no tienen por qué quedar pefectas, pero podemos procurar que sean lo más redonditas posibles, e incluso ayudarnos de una cucharita para que sean todas más o menos igual de grandes.
10. Colocamos las gotitas de chocolate sobre las galletas y... ¡al horno!
11. Deberían estar entre 10-15 minutos horneándose (manteniendo la temperatura de 175ºC) no más, a no ser que os gusten muy muy crujientes (pero as cookies son más blanditas que las galletas ^ ^)
12. Voilá! Sólo hay que sacarlas con cuidado y esperar a que se enfríen para poder comerlas, yummy! *-*
¿Qué os parece? Espero que no os parezca muy difícil, y que lo intentéis ^ ^ Decidme si os gustan este tipo de entradas, y si queréis, podéis hacerme sugerencias de cualquier otra receta que os gustaría ver. ¡Nos leemos en la próxima! ¡Un beso!
Qué buena pinta! Yo hago las cookies típicas gigantescas, pero nunca se me había ocurrido hacerlas de menta la verdad ^^
ResponderEliminarAhora te doy un poquito de bombo en el Twitter de mi blog de cocina jajajaja
Un besote guapa!
Es un sabor... dulce y refrescante, sabe mucho a chocolate y es tan tierna que casi se deshace... además quedan muy muy jugositas ^ ^ Pues muchas gracias, ¡voy a echarle un vistazo a ese blog! ¡Un besazoo!
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